Pienso que les he dado una explicación muy completa sobre este tema, pero para enriquecer más la enseñanza, también les transcribo las explicaciones que dieron otros investigadores y a continuación les traduzco el capítulo que publicó la Logia Unida de Teósofos y cuya versión original en inglés la pueden leer aquí.
Pero para que puedan comprender mejor sus explicaciones, les recomiendo que lean este artículo cuando ya tengan bien asimilada la explicación que les puse en el blog.
CADENAS, GLOBOS, RONDAS Y RAZAS RAÍCES
Nuestro planeta Tierra es parte de una cadena de siete globos, conocida como “la Cadena de la Tierra”.
Y esto significa que este planeta en donde vivimos, tiene seis globos que lo acompañan aunque nosotros no los podamos ver, debido al hecho de que estos globos se encuentran en tres grandes planos de existencia diferentes al nuestro.
(Este gráfico es una simplificación del diagrama que puso Blavatsky en La Doctrina Secreta y corresponde a los cuatro enormes planos de existencia inferiores del Sistema Solar.)
Como lo hemos expresado en otro artículo (ver link) esta es la enseñanza teosófica fundamental que se sabe sobre los planetas como son: la Tierra, Marte, Mercurio, Venus, Saturno, Júpiter, etc.
Y es el hecho de que forman sistemas compuestos de siete globos, y solo uno de esos globos (el más denso) se encuentra a nivel del universo físico en cada caso.
En otras palabras: cada planeta que ven en el espacio, tiene seis globos no físicos asociados a ese planeta, en una relación estrecha e inseparable con su destino y evolución.
Nuestro planeta se encuentra en el plano solar más denso, mientras que los otros seis globos se encuentran en los tres planos solares más elevados al nuestro. Y estos cuatro planos son llamados: “los cuatro planos inferiores de la Conciencia cósmica solar”.
El cosmos local en su totalidad (o sea el sistema solar) consta de siete planos: estos cuatro más densos y también tres planos más elevados.
O sea un cuaternario inferior y una tríada superior.
Al igual que como sucede con los siete principios que conforman la constitución humana, en donde hay cuatro principios inferiores (y mortales) y una trinidad inmortal de los principios espirituales superiores.
(Y yo sospecho que al igual que como sucede con los humanos, la triada superior del sistema solar ha de perdurar a lo largo de la existencia del universo, mientras que su cuaternario inferior se ha de renovar con cada nueva aparición que efectúa el Logos solar a lo largo de su evolución cósmica.)
En el diagrama de hasta arriba vemos las correspondencias entre los siete globos de nuestra cadena terrestre y los cuatro planos inferiores de la conciencia cósmica solar.
Esta enseñanza y el conocimiento sobre las cadenas, los globos, rondas, etc., fueron considerados muy importantes y útiles por los Maestros de la Hermandad transhimalayica y es por ello que fueron enseñados con cuidado y precisión por el Maestro Kuthumi, el Maestro Morya y su discípula Blavatsky durante los primeros días del Movimiento Teosófico.
Y hasta ese entonces, ese conocimiento había sido mantenido totalmente secreto y reservadoexclusivamente para los chelas (los discípulos aceptados) y para los iniciados, y nunca antes había sido dado de manera pública al mundo.
Desafortunadamente después de la muerte de la señora Blavatsky, algunos líderes de la Sociedad Teosófica de Adyar como C.W. Leadbeater y Annie Besant comenzaron a enseñar y popularizar la noción equivocada promovida por el señor Sinnett que el tercer globo de nuestra cadena planetaria es el planeta Marte y que el quinto globo es el planeta Mercurio.
Esta explicación ilógica ha causado mucha confusión y malos entendimientos. Es astronómicamente y astrológicamente ridícula. Y además está en contradicción directa con lo que enseñaron los propios Maestros, Blavatsky y lo que se encuentra escrito en La Doctrina Secreta, porque si esos dos planetas fueran parte de nuestra cadena planetaria, entonces NO seriamos capaces de verlos, ni de saber nada de ellos, ya que como lo mencionamos anteriormente: los globos 3 y 5 se encuentran en un plano de existencia solar enteramente por encima de las percepciones del nuestro.
Pero percibimos muy bien a Marte y a Mercurio y sabemos mucho de ellos. Y por lo tanto es innegable que el planeta Marte y planeta Mercurio son sin lugar a dudas globos del plano físico y por lo consiguiente cada uno de ellos pertenece a una cadena planetaria independiente y separada de la cadena terrestre, ya que acuérdense que una cadena planetaria sólo puede tener un mundo material físico en ella (al igual que el ser humano sólo tiene un cuerpo físico).
La ley de analogía y de correspondencia se ejecuta como un hermoso hilo a lo largo de toda la verdadera enseñanza esotérica, pero es notoriamente distorsionada en las imitaciones baratas.
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Toda la explicación de las cadenas, globos, rondas y razas raíces dada en la enseñanza teosófica puede parecer bastante confusa y difícil de entender. Sin embargo, los Maestros que estuvieron detrás del surgimiento del Movimiento Teosófico consideraron importante que nosotros lo comprendiéramos con claridad y precisión, porque en ello no sólo se revela la naturaleza, origen y el futuro de nuestro planeta, sino que también proporciona las claves simbólicas importantes para el desbloqueo de mayores misterios a través de esta ley de la analogía y correspondencia.
(Pues si tanto les importaba que la gente lo aprendiera, ellos podrían haberlo enseñado con mayor claridad, porque ¡hay cómo sufrí para entender las explicaciones que dieron! Y si además de eso, le añaden las deformaciones e inventos falsos que incorporaron Leadbeater y Besant, el asunto se vuelve extremadamente escabroso.
Tardé meses para ir por fin comprendiendo cómo funciona el asunto, y para ahorrarles ese tiempo, les puse en el blog mi explicación sobre ese tema.)
Pero a pesar de lo complejo, se espera que la siguiente información resumida pueda proporcionar una explicación bastante clara de los conceptos básicos de esta enseñanza:
* La evolución de nuestra Tierra consiste en numerosas cadenas sucesivas, cada una de las cuales se compone de siete globos como se muestra en el diagrama de arriba.
(O sea que así como los humanos evolucionan reencarnando en la Tierra, también el Logos planetario evoluciona materializándose cíclicamente en el universo y más precisamente en el sistema solar. Y en los dos casos: el humano y el planeta, los dos tienen una estructura septenaria.)
* La cadena de su evolución actual de la Tierra (y que llamamos también “la Cadena Terrestre”) ha tenido cadenas que le han precedido, las cuales ya han seguido su curso, han completado su ciclo evolutivo y han dejado de ser. Mientras que las futuras cadenas aún no han llegado a existir, pero lo harán en el futuro y sucesivamente, ya que cada cadena es el producto de su predecesor.
(Hagan la analogía con los antiguos cuerpos que tuvieron en sus vidas pasadas y lo mismo sucede con la Tierra, nada más que a una escala planetaria.)
* La cadena anterior se conoce como “la Cadena Lunar” o “la Cadena de la Luna”, porque el astro muerto llamado Luna (que es el satélite de nuestro planeta) fue el cuarto globo de esa cadena anterior. En otras palabras, la esfera que es ahora nuestra luna fue en un ciclo cósmico planetario anterior, la forma viva del “planeta Tierra” y en donde nosotros mismos nos estuvimos desarrollando en los reinos inferiores de la naturaleza. Y esto fue por supuesto, hace incontables miles de millones de años atrás y es prácticamente incomprensible para nosotros.
(Para dar una analogía, la cadena lunar fue la “reencarnación” anterior de la cadena terrestre y lo que vemos actualmente en el cielo, es el “esqueleto” de esa vida anterior de la Tierra.)
* La “ola de vida evolutiva” pasa a través de cada uno de los siete globos que componen a la cadena planetaria, y esto lo hace siete veces (lo que se conoce como las siete rondas).
Cada ronda ve a la humanidad alcanzar un nivel significativamente más avanzado de evolución, tanto hacia el interior como hacia el exterior, pero el interior es el más importante.
Una ronda comienza en el primer globo de la cadena planetaria y hace que el globo se convierta en activo y vivo.
Siete grandes épocas de la civilización se producen durante cada uno de los globos en cada ronda y en la Teosofía a estas siete grandes épocas se les llaman las “Siete Razas Raíz”, ya que en cada una de esas épocas, un nuevo tipo de la humanidad aparece en la Tierra.
(A mi no me gusta el termino de “raza raíz” porque la gente piensa que se está hablando de razas étnicas, cuando en realidad se está hablando de grandes periodos evolutivos de la humanidad en su conjunto.
Y así estuvo la etapa evolutiva conocida como la civilización lemuriana, y luego estuvo la etapa evolutiva conocida como la civilización atlante, etc.)
* Una vez que la humanidad ha recorrido su ciclo evolutivo a través de las siete razas raíces en el primer globo, entonces la ola de vida pasa al segundo globo, y así sucesivamente hasta llegar al séptimo globo y en cada uno de esos globos la humanidad evoluciona a través de siete razas raíces.
Cuando la ola evolutiva de la vida deja uno de los globos de la cadena y pasa al siguiente globo, el globo que deja entra en un período de inactividad, manteniendo sólo una mínima expresión de la vida en él (la cual no es humana)...hasta que la corriente de vida finalmente vuelva a llega de nuevo a ese mundo particular en la siguiente ronda.
(Y es interesante ver como lo que dicen los Maestros coincide con lo que ha descubierto la ciencia, la cual explica que la vida en la Tierra varias veces casi ha desaparecido y esas grandes extinciones corresponden con esos periodos de inactividad del planeta.)
* Actualmente la vida en nuestra cadena planetaria se encuentra en la cuarta ronda y en el cuarto globo.
Y este período actual de nuestra civilización se encuentra en su quinta etapa evolutiva de esta ronda (denominada la quinta raza raíz).
- La primera raza raíz en nuestro planeta durante esta cuarta ronda se le conoce en la enseñanza teosófica como la civilización polar.
- La segunda raza raíz se le conoce como la civilización hiperbórea.
- La tercera raza raíz se le conoce como la civilización lemuria.
- La cuarta raza raíz se le conoce como la civilización atlante.
- Y la quinta raza raíz se le conoce como la civilización arya o indo-caucásica.
(Ya que han sido los pueblos indo-caucásicos europeos los que más protagonismo han tenido en la evolución de la humanidad en estos últimos milenios. Así como los pueblos atlantes fueron los protagónicos en su época y los pueblos lemurianos en la suya, etc.
Y vemos por consiguiente que los nazis deformaron la palabra “aria” al corresponderla únicamente con “la raza blanca germana”.)
* Cada raza raíz consiste en siete sub-razas. La sexta sub-raza de la actual quinta raza raíz puede comenzar muy gradualmente a aparecer para llegar a plenamente manifestarse dentro de los próximos cientos de años, pero la sexta raza raíz está aún muy lejos de surgir.
(Tampoco me gusta el término de “sub-raza” porque tiene una connotación muy racista, cuando en realidad se está hablando de un conjunto de civilizaciones.
Realmente el vocabulario que utilizaron los instructores teósofos en este asunto es inadecuado y si fuera por mí, yo cambiaría completamente ese vocabulario para que ya no siga generando tanta confusión.)
* La mayoría de nosotros que evolucionamos actualmente como humanos en la Tierra, evolucionábamos como animales cuando la cadena lunar estaba activa. Y los que actualmente son animales en la Tierra, evolucionarán como humanos en la cadena planetaria siguiente, ya que cada mónada (o sea cada “chispa divina” que ha sido enviada desde el Absoluto) evoluciona de forma progresiva y poco a poco a través del reino mineral, el reino vegetal, el reino animal, el reino humano y más allá.
La vida nunca puede ser estática, sino que siempre está en desarrollo, avance y evolución. Siempre hacia adelante y cuando surja la siguiente cadena planetaria, nosotros los humanos actuales, para ese entonces entraremos en un estado mucho más elevado de existencia.
(O sea que los seres de un reino pasan a evolucionar en el reino superior en el siguiente ciclo cósmico planetario.)
* En el gran esquema evolutivo, en cada ronda (y también en menor medida en cada raza raíz de cada ronda) se desarrolla más particularmente uno de los siete principios de la constitución humana hasta que estos principios alcancen la perfección al final del recorrido de las siete rondas.
Pero si no sabemos bien lo que son los siete principios del hombre, entonces no vamos a entender las correspondencias de esos principios con las rondas, lo que va a provocar que terminemos por abandonar la enseñanza que dieron los Maestros a favor de las enseñanzas pseudo-teosóficas que da gente como Leadbeater, Annie Besant, Alice Bailey, etc. Y entonces no vamos a ser capaces de comprender la verdadera naturaleza de la forma en que las cosas proceden.
(Completamente de acuerdo y es por eso que les digo a los estudiantes que aunque la pseudo-teosofía tiene cosas buenas, no les va a permitir comprender como funciona la evolución, porque son una deformación de las verdaderas enseñanzas aportadas por los Maestros transhimalayicos y sus discípulos.)
* En el punto medio exacto de la quinta ronda vendrá por así decirlo “el momento de la elección”. Lo que se conoce en el cristianismo como “el Día del Juicio” en donde se separará a aquellos que quieren seguir moviéndose hacia adelante y hacia lo divino en su evolución interior, de aquellos que no lo quieren hacer.
Y estos últimos serán sacados del ciclo de la encarnación hasta la siguiente cadena. Su desarrollo y progreso se retrasarán por una increíble cantidad de tiempo, y todo ello como resultado de su egoísmo, de su pereza mental y de la negatividad de su comportamiento.
Y la razón de que esto suceda es con el fin de que la humanidad pueda seguir avanzando como debe ser, en lugar de ser frenada por aquellas almas que se niegan a evolucionar.
(Algo por el estilo he leído en otras enseñanzas. Ahora bien, los criterios de admisión son muy amplios y realmente el individuo tuvo que haber sido alguien muy malo y rehusarse a cambiar por más oportunidades que se le dieron, para que repruebe y se posponga su evolución hasta la siguiente cadena planetaria.)
* Cada evolución planetaria en el sistema solar está confinado en su manifestación a estos “cuatro planos inferiores de la Conciencia cósmica solar”.
Y la ley de la evolución cíclica (implicando los globos, las cadenas, las rondas, las razas raíces, etc.) se aplica a todos los planetas de nuestro sistema solar.
Blavatsky y los Maestros enseñan que casi todas las cadenas planetarias de nuestro sistema solar (así como aquellas que se encuentran más allá) están habitadas. Lo que no significa que los planetas físicos que podemos ver en el espacio (Marte, Venus, Saturno, Júpiter, etc.) estén habitados. Sino que la oleada de vida se encuentra actualmente en alguno de los seis globos superiores de esas cadenas planetarias.
Y sobre ese tema, el Maestro Kuthumi escribió que el mundo físico de Marte se encuentra actualmente en un estado de total inactividad debido a que la oleada de vida se encuentra en un globo sutil. Mientras que la oleada de vida de Mercurio apenas va a comenzar una nueva ronda.
(Pastor menciona que cuando la vida física tiene que aparecer en un sistema estelar, sólo aparece en un planeta a la vez. Y aquellos que se pregunten cómo la vida podría volver a surgir en un planeta tan cercano al sol como lo es Mercurio, es porque Mercurio va a comenzar su séptima y última ronda. En donde la vida ya ha trascendido la materia y cuando la ola de vida llegue al cuarto globo de la cadena de Mercurio, esta no se va a manifestar en el plano físico, sino en el plano mental del Mercurio.)
* La cadena de Venus tiene una relación muy estrecha con la cadena de la Tierra. Blavatsky nos dice en La Doctrina Secreta que Venus y la Tierra son referidas en la Ciencia Esotérica como: “las hermanas gemelas”, pero "el Espíritu de la Tierra está bajo la guía del Señor de Venus”. Y continúa diciendo: “Venus es el más oculto, poderoso y misterioso de todos los planetas, y también aquel cuya influencia y relación con la Tierra es más prominente”.
También ha enseñado que Venus es “el Espíritu protector de la Tierra y de los hombres” y que “de acuerdo con la enseñanza oculta, este planeta [Venus] es el primogénito de la Tierra y su prototipo espiritual”.
Se nos dice que todos los cambios que se llevan a cabo en Venus “se sienten y también son reflejados en la Tierra”. Y Blavatsky añade que el planeta Venus “es el portador de la luz a la Tierra, tanto en su sentido físico como místico”.
Por ello, en la antigüedad se denominaba a Venus como “la estrella resplandeciente de la mañana” y la cual es una denominación que fue aplicada también en la Biblia para designar a Lucifer y a Jesús.
Esto podrá parecerles muy extraño, pero lo detallo y esclarezco en los siguientes capítulos:
Algunas personas, después de leer o escuchar lo que la enseñanza teosófica tienen que decir acerca de todos estos asuntos técnicos: globos, cadenas, rondas, razas raíces, la evolución planetaria y solar, etc.
Dicen:
- “Todo esto suena interesante, aunque un poco complicado, pero no parece tener ningún beneficio o importancia real en la práctica para los seres humanos. Por lo tanto, ¿para qué estudiar y conocer acerca de este tipo de cosas?”
Y la respuesta es que el estudio de lo espiritual, de lo metafísico y de las enseñanzas filosóficas. Ese estudio es en sí mismo un ejercicio espiritual valioso, ya que nos ayuda a elevar nuestra mente y nuestra conciencia sobre las cosas comunes y cotidianas de la materia, lo que nos permite una visión inspiradora (e intuitiva) de una realidad más elevada y espiritual, la cual de otra manera no podríamos percibir. Y esa simple razón es suficiente para alentar el esfuerzo de estudiar y obtener un profundo conocimiento de los aspectos más complejos de la Teosofía.
(Lo humanos no sólo necesitan aprender cosas prácticas sino también trascendentales para alimentar su espíritu. Porque sin la astronomía, la poesía, la filosofía, el esoterismo, la espiritualidad y todo aquello que trasciende la vida practica, entonces solamente seriamos seres materialistas.)
COMENTARIOS
Un primer comentarista pregunta:
¿De cuántos años es aproximadamente una ronda?
¿Podría explicarnos por qué es que no podemos encontrar más rastros de civilizaciones avanzadas que desaparecieron como la que hubo en la Isla de Pascua o la civilización precolombina que floreció en el Machu Pichu?
¿Cómo explica que esas antiguas civilizaciones estaban más avanzadas que nosotros en lo que se trata de obras de ingeniería con la piedra?
¿Y cuándo la civilización comenzó la cuarta ronda?
Respuestas:
Gracias por sus comentarios y preguntas.
Las diversas rondas no son todas de la misma duración y Blavatsky precisó que las cifras exactas no se pueden todavía divulgar de manera pública, por lo que esta es una cuestión que no podemos responder con precisión debido a la falta de conocimiento sobre el asunto.
(Lo que yo he encontrado sobre ese tema, lo publiqué en el capítulo: calendario cósmico)
Pero en lo que respecta a tus otras preguntas y en particular a la última, es probable que encuentres respuestas en el artículo que publicamos con el titulo de:
- “La evolución humana explicada en La Doctrina Secreta”
Y que puedes leer en este link.
(Cuando pueda lo traduzco o hago un capítulo al respecto.)
Un segundo comentarista dice:
Hola. Si no te importa, tengo dos preguntas que necesitan respuesta. En primer lugar, la enseñanza teosófica explica que estamos en constante evolución a través de una cantidad increíble de tiempo y en un estado cada vez mayor de la conciencia. Lo cual es incompatible con la posibilidad de alcanzar una liberación final (Nirvana) aquí en la Tierra en nuestros cuerpos mortales.
Son muchas las historias en la literatura religiosa de gente que alcanzar el Nirvana en la Tierra. ¿Es solo ficción? Porque desde mi punto de vista, este artículo hace sentir que la unión con Dios parezca una hazaña inalcanzable.
En cuanto a mi otra pregunta, se dice que hay dos globos en el plano arquetípico, dos globos en el plano intelectual y dos globos en el plano sustancial.
¿Cómo es posible eso?
Y supongamos que comienzo a funcionar en el plano sustancial (¿es el astral?)
¿Voy a ver dos planetas diferentes o voy a ver uno en el astral inferior y el otro en el mismo lugar pero en el astral superior?
Respuestas:
Gracias por tus preguntas.
Para intentar responder a tu primera duda: la enseñanza teosófica no es incompatible con la entrada en el Nirvana, ni tampoco implica que la unión con Dios sea una hazaña inalcanzable.
Para aclarar el asunto, la enseñanza teosófica explica que cualquier humano puede alcanzar el Nirvana en cualquier momento durante este vasto ciclo evolutivo si hace el progreso necesario para ello. Esto depende totalmente de la persona, y si usted o yo tuviéramos ya el nivel requerido, entonces podríamos en la actualidad entrar en el Nirvana.
Para ello tendríamos que ser reabsorbidos dentro del Absoluto y a pesar de eso, el ciclo evolutivo en la Tierra, en el Sistema Solar y en el resto del Universo, seguirían continuando para todos los demás.
En la Teosofía, sin embargo, el motivo para alcanzar la iluminación, no es con el fin de entrar en el Nirvana y dejar el mundo atrás, sino más bien para renunciar a la felicidad que procura el Nirvana con el fin de seguir el camino del Bodhisattva y el camino de los Budas de compasión, quienes prefieren quedarse con la humanidad que sufre, con el fin de instruir, ayudar y guiar a los humanos a evolucionar.
Hay un gran, majestuoso y misterioso propósito en el objetivo de la evolución cósmica y no estamos participando adecuadamente si tratamos de escapar de esa evolución.
Esos grandes instructores de los que hablan los teósofos y a los que denominan “Los Maestros” son Bodhisattvas. Y si ellos quisieran, podrían efectuar los últimos pasos para entrar en el Nirvana, ya que han llegado a ese punto en que pueden hacerlo, pero ellos se niegan a entrar en el Nirvana porque entonces ya no podrían ayudar más a la humanidad. Y ellos dicen que el Señor Buda (que es su jefe) también se negó a entrar en el Nirvana, a pesar que digan lo contrario los budistas ortodoxos de la escuela Theravada.
Blavatsky menciona que existen dos caminos: el camino de la liberación y el camino de la renuncia. Puedes leer más sobre eso (en inglés) en este link.
Este asunto de la entrada en el Nirvana y de los dos caminos lo he detallado en estos dos capítulos:
Referente a tu segunda pregunta, la “distancia” no es un factor en esto. Pero en cambio la enseñanza teosófica explica que uno puede percibir lo que se encuentra en un plano de existencia cuando la conciencia se eleva a ese plano de existencia.
Si lees lo que escribió William Judge sobre ese tema en su libro “El Océano de la Teosofía” más los tres artículos que escribió sobre “la cadena terrestre y los globos” te esclarecerá más ese asunto.
Sobre esta duda, lo primero que hay que comprender es que los globos superiores de una cadena planetaria no se encuentran en los planos sutiles que la gente usualmente conoce, sino en planos todavía más elevados. Y lo segundo que hay que comprender es que la ubicación de los globos es representativa y por consiguiente no hay que tomarla al pie de la letra.
Ese asunto yo lo he esclarecido en estos tres capítulos:
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